PROBLEMAS DE CONCIENCIA

1 Corintios 8

Alguna vez te ha pasado que estás en duda sobre determinada decisión que piensas tomar. Y piensas ¿Estará bien? ¿Será pecado o no? Antes de comentar lo que Pablo dice al respecto en el capítulo 8 de 1a de Corintios quiero compartirte algunos aspectos que entiendo sobre el pecado en el contexto bíblico. En primer lugar, pecado es cualquier acto u omisión que ofende a Dios o a otra persona; en segundo lugar, el pecado siempre nos causa un daño, afecta nuestra salud ya sea en lo físico, emocional, mental o espiritual.
El capítulo 8 de la primera carta a los corintios, Pablo aborda un caso específico, seguramente contestando alguna pregunta epistolar. Para entender la respuesta he tratado de reconstruir la pregunta, la cual sería algo parecido a ¿Oye Pablo, es malo comer el alimento que se ofrece en sacrificio a los ídolos? El apóstol no responde simple y llanamente, si no que nos enseña unos principios donde interviene la conciencia.
Para ubicarnos en el contexto religioso y cultural de la época, recordemos que los habitantes de Corinto practicaban el politeísmo, Pablo da por sentado que sus lectores entendían que solo hay un único Dios verdadero y que el rendir culto a otros 'dioses' era idolatría, lo cual ofendía a Dios. Hasta allí todos de acuerdo, sin embargo, había una controversia, los corintios ofrecían sacrificios de animales como parte de su adoración a sus deidades, parte de esa carne la usaban como ofrenda y parte se vendía en los mercados o la consumía el adorador en su casa y a veces lo compartía con sus vecinos cristianos ¿Sería malo consumir de esa carne? ¿Consumir este alimento, no sería esto participar en la adoración a los ídolos?
Algunos estaban convencidos que comer esto que había sido sacrificado a los ídolos era pecado, probablemente la mayoría que opinaba de esta manera eran los que en su momento habían practicado este tipo de adoración idolátrica y ahora sentían aversión por esta clase de comida.
Otros, en cambio opinaban que no tenía nada de malo, debido a que tenían el conocimiento que la imagen o las estatuas que la gente adoraba no tenían vida, ni ningún poder para influir en los humanos,, mucho menos podrían contaminar la comida, por otro lado, debido a que el momento en que estos creyentes tenían la oportunidad de comprar o comer de este alimento, era en un tiempo posterior al acto de adoración pagano, no sentían haber participado en idolatría.
Pablo era de esta última opinión, consideraba esta forma de ver las cosas con más madurez y conocimiento. Sin embargo les dice algo sorprendente, que aunque tenían razón, solo por el hecho que esto podía ser causa de tropiezo para los menos maduros, debían evitar comer esa carne sacrificada a los ídolos. Les dice: “En cuanto a lo sacrificado a los ídolos, sabemos que todos tenemos conocimiento. El conocimiento envanece, pero el amor edifica.” V.1.
Reflexionando:
Hay pecados que yo llamaría absolutos, no importa la cultura, el contexto u otra cosa, siempre serán pecados: el asesinato, robo, envidia, fornicación, adulterio, etc. Sin embargo hay, actos que en sí mismos no son pecados, pero que se convierten en lo que llamaría pecados de conciencia, veamos tres casos:
1. Puede ser que cierto acto no ofende a Dios, ni daña a algún semejante, pero quien está en dilema de hacerlo o no hacerlo está convencido que está mal y aun así lo hace, está pecando de rebelde, por causa de su conciencia.
2. Cierto acto que en sí mismo no ofende a Dios, se puede tornar pecaminoso si hiere la conciencia de algún creyente menos maduro y esto causa de tropiezo a dicho creyente, Pablo dice “contra Cristo pecáis” V12 pues se cometería con plena conciencia que se está dañando al semejante.
3. ¿Y si no estamos seguros que sea malo? ¿Lo hago o no lo hago? Si quieres asegurarte de no ofender a Dios, no lo hagas.
“Por lo cual, si la comida le es a mi hermano ocasión de caer, no comeré carne jamás, para no poner tropiezo a mi hermano” V13

TRANSFORMADOS PARA SERVIR
JOSIAS I.G.G